viernes, 18 de febrero de 2011

EL SOL Y SUS EFECTOS EN EL PLANETA

Nosotros sabemos que algo esta pasando con nuestro planeta, por los cambios atmosféricos que vemos y sentimos y que antes no teníamos tan seguido.El calor y el frió ha ido aumentando desde 1999.Si mal no recuerdo en agosto 11 del 99, se formó la tan llamada Cruz Cósmica en donde el planeta Tierra quedo en  medio.Los tsunamis,terremotos,ciclones y las lluvias de estrellas (o meteoritos)se han manifestado mas seguido.Muchos nos preguntamos a que se debe esto.Las religiones dicen que esta cerca el fin del mundo basándose en lo que dice el apocalipsis de San Juan.Bueno pues aquí les voy a poner algunas investigaciones que ha hecho la nasa y ustedes saquen sus propias conclusiones.


TEMBLORES ESPACIALES RETUMBAN EN LA CERCANÍA DE LA TIERRA

Investigadores de la NASA han descubierto "temblores" en el campo magnético de la Tierra, los cuales parecen estar conectados con las auroras y podrían tener un impacto importante en el estado del tiempo en el espacio.

Estruendos sin sonido
Lluvia de auroras
Campos magnéticos sacudidos
¡Cuidado con el temblor espacial!
Julio 27, 2010: Utilizando la flota de cinco naves espaciales THEMIS, de la NASA, los investigadores han descubierto un fenómeno relacionado con el tiempo en el espacio que tiene la potencia de un terremoto y desempeña un papel importante en el proceso de hacer resplandecer las auroras boreales. Lo llaman "temblor espacial".
Un temblor espacial es un temblor que tiene lugar en el campo magnético de la Tierra. Se puede detectar principalmente en la órbita terrestre, pero no se limita al espacio exterior. Los efectos pueden incluso alcanzar la superficie de la Tierra.

Derecha: Un temblor espacial en acción. Haga clic aquí para dar comienzo a la película de una simulación por computadora creada por Walt Feimer, del Laboratorio de Visualización Científica, del Centro Goddard para Vuelos Espaciales.
"Se han detectado reverberaciones magnéticas en estaciones terrestres de todo el mundo, de una manera similar en la cual los detectores sísmicos registran un gran terremoto", dice el investigador que lidera el proyecto THEMIS, Vassilis Angelopoulos, de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA, por su sigla en idioma inglés).
Ésta es una buena analogía porque "la energía total de un temblor espacial puede compararse con la de un terremoto de magnitud 5 o 6", según Evgeny Panov, del Instituto de Invesgitación Espacial, en Austria. Panov es uno de los autores principales de un artículo de investigación que anunció estos resultados en la edición de abril de 2010 de Geophysical Research Letters (Cartas de Investigación en Geofísica o GRL, por su sigla en idioma inglés).
En el año 2007, el proyecto THEMIS descubrió los precursores de los temblores espaciales. El fenómeno comienza en la cola del campo magnético de la Tierra, la cual es estirada, como si fuera una manga de aire, por el viento solar que se mueve a millones de kilómetros por hora. En ocasiones, la cola puede estirarse tanto y someterse a una tensión tan grande, que cuando recobra su forma original lo hace súbitamente, como una banda elástica que experimenta una torsión excesiva. El plasma del viento solar atrapado en la cola se precipita hacia la Tierra. En más de un evento, las cinco naves del proyecto THEMIS se encontraron en la línea de fuego cuando uno de estos "chorros de plasma" barrió la región. Claramente, los chorros iban a hacer contacto con la Tierra. ¿Qué ocurriría entonces? Para averiguarlo, la flota de naves espaciales se desplazó más cerca de nuestro planeta.
"Ahora lo sabemos", dice David Sibeck, el científico que es integrante del proyecto THEMIS, en el Centro Goddard para Vuelos Espaciales. "Los chorros de plasma causan temblores espaciales".

Arriba: Durante un temblor espacial, el campo magnético de la Tierra se sacude de manera análoga a cómo lo hace el suelo durante un terremoto. Crédito de la imagen: Evgeny Panov, Instituto de Investigación Espacial de Austria. [Imagen ampliada]

Según el proyecto THEMIS, los chorros se estrellan contra el campo geomagnético a aproximadamente 30.000 km por encima del ecuador de la Tierra. El impacto causa un proceso de rebote, en el cual el plasma de hecho rebota hacia arriba y hacia abajo, siguiendo el campo magnético que está reverberando. Los investigadores lo llaman "repulsión repetitiva de flujo". Es parecido a una pelota de tenis que rebota hacia arrriba y hacia abajo sobre un piso alfombrado. El primer rebote es grande, y los rebotes sucesivos son de amplitud decreciente debido a que la energía se disipa en la alfombra.
"Durante mucho tiempo, hemos sospechado que algo de esta naturaleza estaba ocurriendo", dice Sibeck. "Sin embargo, al observar el proceso in situ, el proyecto THEMIS ha descubierto algo nuevo y sorprendente".
Lo sorprendente de esto son los vórtices de plasma, enormes bucles de gas magnetizado tan grandes como la Tierra misma, que se forman alrededor de la región donde el campo magnético está siendo sacudido.
"Cuando los chorros de plasma golpean la magnetósfera interna, aparecen y desaparecen vórtices que giran en direcciones opuestas a ambos lados del chorro de plasma", explica Rumi Nakamura, del Instituto de Investigación Espacial, quien es uno de los co–autores del estudio. "Creemos que estos vórtices pueden generar corrientes eléctricas sustanciales en el ambiente cercano a la Tierra".
Si actuaran en conjunto, los vórtices y los temblores espaciales podrían tener un efecto apreciable sobre la Tierra. Las colas de los vórtices podrían dirigir partículas hacia la atmósfera terrestre, haciendo resplandecer auroras y creando ondas de ionización que interfieren en las comunicaciones por radio y en el GPS (Global Positioning System o Sistema de Posicionamiento Global, en idioma español). Al arrastar campos magnéticos superficiales, los temblores espaciales generan corrientes eléctricas en el piso sobre el que caminamos. Las sobrecargas de corriente en el suelo pueden tener profundas consecuencias ya que, en casos extremos, pueden deshabilitar redes de energía en áreas muy extensas.

Derecha: Un mapa creado por el proyecto THEMIS que muestra flujos de plasma durante un temblor espacial. Los ejes están dados en radios terrestres, por lo que cada bucle es aproximadamente del tamaño de la Tierra. [Imagen ampliada]
Después de que el proyecto THEMIS descubrió los chorros y los temblores, Joachim Bim, del Laboratorio Nacional de Los Álamos, en Nuevo México, llevó a cabo una simulación por computadora del proceso de rebote. Y quién lo diría, los vórtices aparecieron de acuerdo con lo establecido por las mediciones del proyecto THEMIS. Además, las simulaciones sugieren que el proceso de rebote puede ser observado desde la superficie de la Tierra, en forma de ondulaciones y remolinos que aparecen en las auroras. Las estaciones en la Tierra informan precisamente sobre un fenómeno parecido.
"Aunque es un proceso complicado, todo concuerda", dice Sibeck.
El trabajo aún no está terminado. "Todavía tenemos mucho que aprender", agrega. "¿Cuán grandes pueden ser los temblores espaciales? ¿Cuántos vórtices pueden girar en torno a la Tierra en un momento dado —y cómo interaccionan entre sí?"
Manténgase en contacto para obtener más respuestas proporcionadas por el proyecto THEMIS.
Vórtices que giran
Remolinos de plasma
Richter predice
uno de magnitud seis


Créditos y Contactos
Autor: Dr. Tony Phillips
Funcionaria Responsable de NASA: Ruth Netting
Editor de Producción: Dr. Tony Phillips
Curador: Bryan Walls
Relaciones con los Medios: Steve Roy Traducción al Español: Juan C. Toledo,Ramiro Franco
Editora en Español: Angela Atadía de Borghetti
Formato: Juan C. Toledo
El Directorio de Ciencias del Centro Marshall para Vuelos Espaciales de la NASA patrocina el Portal de Internet de Science@NASA que incluye a Ciencia@NASA. La misión de Ciencia@NASA es ayudar al público a entender cuán emocionantes son las investigaciones que se realizan en la NASA y colaborar con los científicos en su labor de difusión.








ERUPCIONES MASIVAS SACUDEN AL SOL

Diciembre 13, 2010: El 1 de agosto de 2010, un hemisferio entero del Sol hizo erupción. Filamentos de magnetismo se desprendieron y explotaron, ondas de choque se desplazaron a toda velocidad por la superficie estelar y nubes de gas caliente de miles de millones de toneladas fueron expulsadas hacia el espacio. Los astrónomos sabían que acababan de presenciar algo importante.
Fue un suceso tan importante que quizás haya hecho pedazos varias ideas antiguas sobre la actividad solar.
"El evento del 1 de agosto en verdad nos abrió los ojos", dice Karel Schrijver, quien trabaja en el Laboratorio Astrofísico y Solar de la empresa Lockheed Martin, en Palo Alto, California. "Vemos ahora que las tormentas solares pueden ser eventos globales, que se desarrollan a escalas que antes no podíamos imaginar".

Haga clic aquí para ver una película, grabada en el ultravioleta extremo, de la erupción global del 1 de agosto. Diferentes colores representan diferentes temperaturas del plasma en el rango de 1,0 a 2,2 millones de Kelvin. Crédito del video: Observatorio de Dinámica Solar.
Schrijver ha estado trabajando por los últimos tres meses con el físico solar, y colega en Lockheed Martin, Alan Title, con el fin de entender lo que ocurrió durante la "Gran Erupción". Tenían muchos datos para analizar. El evento fue registrado con un nivel de detalle sin precedentes por el Observatorio de Dinámica Solar (Solar Dynamics Observatory o SDO, en idioma inglés) y por las naves espaciales gemelas STEREO (sigla en idioma inglés de Observatorio de Relaciones Solares - Terrestres), de la NASA. Con varios de sus colegas presentes para ofrecer comentarios, delinearon sus hallazgos hoy en una conferencia de prensa que tuvo lugar en el marco de la reunión de la Unión Geofísica Estadounidense, en San Francisco.
Las explosiones solares no son eventos aislados y localizados, anunciaron. La actividad solar está interconectada por medio del magnetismo a lo largo de distancias asombrosas. Fenómenos como las erupciones solares, los tsunamis y las eyecciones de masa coronal pueden ocurrir todos al mismo tiempo, incluso separados por cientos de miles de kilómetros, conformando un concierto caótico de complejidad abrumadora.

Las naves espaciales gemelas STEREO, de la NASA, alrededor del Sol. [Página oficial de STEREO]
"Ya no es suficiente enfocarnos en los campos magnéticos de regiones activas aisladas si queremos predecir erupciones solares", dice Title, "ahora debemos conocer el campo magnético superficial de prácticamente todo el Sol".
Esta revelación incrementa la carga de trabajo de quienes pronostican el tiempo en el espacio, pero también aumenta la potencial precisión de sus predicciones.
"La estrategia de estudiar globalmente el Sol podría traer grandes avances en la predicción de la actividad solar", comenta Rodney Viereck, quien trabaja en el Centro para la Predicción del Tiempo en el Espacio, en Boulder, Colorado, el cual pertenece a la Administración Nacional Océanica y Atmosférica (National Oceanic and Atmospheric Administration o NOAA, por su sigla en idioma inglés). "Esto, a su vez, permitirá brindar mejores pronósticos a nuestros clientes, como por ejemplo a los operadores de redes eléctricas o aerolíneas comerciales, quienes podrían actuar de forma pertinente para proteger sus sistemas y afianzar la seguridad de los pasajeros y de la tripulación".
En un artículo que prepararon para la Revista de Investigación Geofísica (Journal of Geophysical Research o JGR, por su sigla en idioma inglés), Schrijver y Title identificaron más de una docena de significativas ondas de choque, llamaradas, erupciones de filamentos y eyecciones de masa coronal, que abarcan 180 grados de longitud solar y 28 horas de tiempo. Al principio, parecía que se trataba de un conjunto de estrépitos; pero eso fue solamente hasta que confeccionaron gráficos de los eventos en un mapa del campo magnético solar.
Title describe este momento, que es digno de un ¡Eureka!: "Vimos que todos los eventos de actividad solar sustancial estaban conectados entre sí por medio de un extenso sistema de capas separatrices, separadoras y cuasi–separadoras". Una capa "separatriz" es una zona magnética parecida a una falla geológica, donde pequeños cambios en las corrientes de plasma circundantes pueden disparar grandes tormentas electromagnéticas.

Las zonas donde ocurrieron los eventos más importantes están indicadas en esta imagen del Sol capturada en el ultravioleta extremo. Dicha imagen fue obtenida por el Observatorio de Dinámica Solar durante la Gran Erupción del 1 de agosto. Las líneas blancas trazan el campo magnético solar. Crédito de la imagen: K. Schrijver & A. Title. [Imagen ampliada]
Durante mucho tiempo, los investigadores han sospechado que este tipo de conexión magnética era posible. "La noción de que podría haber erupciones solares 'solidarias' tiene al menos tres cuartos de siglo", escribieron en su artículo para la JGR. En algunas ocasiones, los observadores veían erupciones solares que estallaban una después de la otra —como si fueran palomitas de maíz—, pero era imposible demostrar que existía un vínculo entre ellas. Los argumentos que apoyaban la idea de causa y efecto eran estadísticos y muchas veces dudosos.
"El SDO y las naves espaciales gemelas STEREO han revolucionado esta clase de trabajo", dice Lika Guhathakurta, quien es investigadora del programa Viviendo con una Estrella, de la NASA. "Las tres naves espaciales, en conjunto, monitorizan el 97% de la superficie del Sol, permitiendo de este modo a los investigadores ver conexiones que eran muy difíciles de percibir en el pasado".

Concepto artístico del Observatorio de Dinámica Solar (SDO, por su sigla en idioma inglés). [Página oficial de SDO]
Como prueba de ello, aunque solamente dos terceras partes del evento que tuvo lugar en el mes de agosto fueron visibles desde la Tierra, éste fue registrado en su totalidad por la flota SDO–STEREO. Además, las mediciones del campo magnético solar que fueron llevadas a cabo por el SDO revelaron conexiones directas entre los varios componentes de la Gran Erupción, y esta vez no fueron necesarias las estadísticas.
Queda mucho trabajo por hacer. "Estamos aún separando las causas de los efectos", dice Schrijver. "¿Fue el evento una gran reacción en cadena, en la cual una erupción desataría otra —bang, bang, bang— en secuencia? ¿O todo ocurrió de forma simultánea, como consecuencia de algún cambio a mayor escala en el campo magnético del Sol?"
Es posible que el análisis futuro revele el detonador subyacente. Por ahora, el equipo está todavía acostumbrándose a la idea del carácter global de la actividad solar. Un comentarista recordó la vieja historia de los tres hombres ciegos que describen un elefante: uno toca su trompa, otro sostiene su cola y el tercero le huele una uña. Estudiar el Sol mirando una mancha solar a la vez puede ser tan limitante como lo ocurrido en esa historia.
"No quiere decir que todas las erupciones serán globales", destaca Guhathakurta. "Pero el carácter global de la actividad solar ya no puede ser ignorado".
Como si el Sol no fuese ya lo suficientemente grande ...
Créditos y Contactos
Autor: Dr. Tony Phillips
Funcionaria Responsable de NASA: Ruth Netting
Editor de Producción: Dr. Tony Phillips Traducción al Español: Juan C. Toledo
Editora en Español: Angela Atadía de Borghetti
Formato: Juan C. Toledo

Más información
Observatorio de Dinámica Solar —Página oficial del SDO.
Observatorio de Relaciones Solares - Terrestres —Página oficial de las naves gemelas STEREO.







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